Ethel Barja
Travesía invertebrada
Travesía invertebrada
1
Una laceración
sin testigos
es una carta que viaja
de una mano muerta
a otra mano muerta
y boga en la noche
con toda su diástole
a sofocar el horizonte,
a forzarle la lengua.
2
Un satélite cayó en el jardín.
Los enterrados sacuden sus brazos
cráteres de luz
susurran toda la noche.
3
Hemos caído
pero no tenemos precipicio;
entonces,
seguimos cavando.
Pensé en mi padre
en la cascada de su voz
y en nuestra orilla
sin linaje
de un firmamento
por hacerse.
Cuando llegó la hora,
reuní a mis hijos
y emprendimos la ruta.
Para distraerlos les hablé
de los litorales
que nos esperaban
de su brisa y sus acantilados.
Murió el más pequeño
su cuerpo era un nudo
de sombras y sargazos
donde empezó
a deshacerse el sedimento.
4
Se diluye el ánfora y gotea
el ojo cálido del cielo.
¿Hacia dónde señala
la historia vertical
del árbol
donde te ataron?
¿Hacia dónde apunta
la metódica rigidez
de lo inerte?
¿Quién me dirá
lo que indica
el oasis
de tu cuerpo?
Háblame
ven
como antes
a despejar la noche,
como quien despeja
el aire para mi vuelo.