José F. A. Oliver 
Translator

on Lyrikline: 11 poems translated

from: espanhol, croata, esloveno, curdo to: alemão

Original

Translation

MALDITOS POEMAS DE AMOR

espanhol | Julio Barco

Para M. 

Para llegar a ti
tendré que cambiar mi nombre
y reemplazar esta fatiga de mi vida. Yo no sé
qué haré. Tampoco sé si tenga que
hacer ejercicios: hace tiempo
que no gozo del amor.
Todo es furor y hace sol por este lado.
Y tomo una pequeña copa de ron,
para llegar a ti
repetiré calles, medusas, estrellas. Yo sé que vives
a un puñado de kilómetros
y mi sonrisa es una nube lila detenida
en la esquina donde bailan las peonías. Tendré que
ser feliz abriendo
una ventana. Para llegar a ti tengo
que caminar sin demora, por el discurso de
las cosas inútiles. Los autos y las nubes,
enardecido viento
en la ropa de algodón
y la ruda en los bolsillos, esta soledad serán una
dulce paloma entre mis manos.
Para llegar a ti tendré que callarme a veces
y morder una manzana. Para llegar a ti
tiernamente dejaré de tocar un rato mi piano
y compraré algunas tostadas. Y meteré
dos hojitas de un girasol
a mis bolsillos. Nada más simple
y estúpido amo.
Ahora estoy ebrio y no sé
si así pueda llegar a ti.

© Julio Barco
Audio production: Haus für Poesie, 2021

DIESE VERDAMMTEN LIEBESGEDICHTE

alemão

Für M. 

 

Um dir nah zu sein  

muss ich meinen Namen ändern  

und dieses Gefühl der Ermattung in mir vergessen. Ich weiß nicht 

was ich tun werde. Ich weiß auch nicht, ob ich  

noch üben muss: Ich habe die Liebe  

schon lange nicht mehr gekostet. 

Alles ist Aufruhr, aber auf dieser Seite scheint die Sonne.  

Und ich trinke ein Gläschen Rum, 

um dir nah zu sein 

werde ich Straßen, Medusen, die Sterne auswendig lernen. Ich weiß, du lebst 

nur ein paar Kilometer von hier 

und mein Lächeln ist eine Fliederwolke in zartem Rosa 

an jener Straßenecke, wo die Pfingstrosen tanzen. Ich werde 

mich erst glücklich wähnen, wenn ich  

ein Fenster aufreiße. Um dir nah zu sein, muss ich  

dir ohne zu zögern begegnen und im Gespräch  

über nutzlose Dinge bestehen. Die Autos, die Wolken 

der sengende Wind 

in den Baumwollkleidern 

und in meiner Hosentasche Gnadenrauten – all diese Einsamkeiten werden  

in meinen Händen eine sanfte Taube. 

Um dir nah zu sein, muss ich manchmal einfach nur schweigen 

und in einen Apfel beißen. Um dir nah zu sein 

werde ich für einen zärtlichen Augenblick mein Klavierspiel unterbrechen 

und Toastbrot kaufen. Ich werde 

zwei kleine Sonnenblumenblätter 

in meine Hosentaschen stopfen. Nichts Einfacheres, 

und Törichteres liebe ich. 

Jetzt bin ich doch leicht berauscht und weiß nicht mehr,  

ob ich dir auf diese Art und Weise nah sein kann.

Übersetzt von José F. A. Oliver

SALCHIPAPA

espanhol | Julio Barco

Pound enloqueció buscando la ética entre los usureros
Eliot estaba totalmente cuerdo frente a una maceta de gladiolos
Luchito Hernández miraba stone una isla alada
Kafka era más flaco que el espantapájaros de Girondo
Lezama Lima se puso una maceta en la cabeza
Dylan Tomas come un ceviche en la esquina
Verástegui era fanático de las ciruelas
Jaime Sabines se jactaba de ser el único poeta que mantuvo una chamba
por más de cinco años
José Peláez estaba obsesionado buscando las listas de los mejores poemarios del 2018
Federico Núñez estaba perdido en una obra obsesiva pero difícil con entretenidos obstinados anhelos psicotrópicos
D.F.W. se suicidó igual Hemingway y Arguedas

© Julio Barco
Audio production: Haus für Poesie, 2021

SALCHIPAPA

alemão

Pound drehte durch, als er unter den Kredithaien nach so etwas wie Ethik suchte 

Eliot war beim Anblick von Gladiolen immer ganz bei sich 

Luchito Hernández war stoned wie eine Insel mit Flügeln 

Kafka noch dünner als Girondos Vogelscheuche 

Lezama Lima setzte sich einen Blumentopf aufs Haupt  

Dylan Tomas isst gleich dort an der Straßenecke Ceviche  

Verástegui war verrückt nach Pflaumen 

Jaime Sabines rühmte sich, als einziger Dichter einen Job länger als fünf Jahre auszuhalten 

José Pelaez war besessen davon, die besten Lyrikbände des Jahres 2018 aufzulisten 

Federico Nuñezʼ Obsession waren seine unterhaltsam hartnäckigen psychotropischen Sehnsüchte 

D.W.F beging Selbstmord – wie Hemingway und Arguedas

Übersetzt von José F. A. Oliver

AUTOCONCIENCIA DE UN JOVEN LATINOAMERICANO INCLINADO AL GOZO

espanhol | Julio Barco

La belleza sirve para entusiasmar en el trabajo,
el trabajo para resurgir
C. Norwid

Ahora mismo hablaba de mí conmigo
Vallejo


10:35
La mañana modernista con sus nubes neobarrocas & ya van 10 poemas desasosegados, y seguiré hasta las dos -hora donde me toca ir a Lima y tomarme una foto para un bellísimo libro que alegrará a tu familia, vecinos y amigos.

10:35
Voy a explosionar.       

10:39
(…)        

11:11
Pienso que no debí escribir ni borrar todo lo que siento por ti. Pienso en la rosa que ayer bruscamente robé y con la que recorrí el Jirón de la Unión. Pienso, ¿cuál es el perfecto poema? ¿Mi desesperación a inicios de verano o tu belleza de potranca frente a un horizonte de frescas dadivosas? Pienso en todos los archivos con bellos poemas que existen en el universo. Más allá de la rotación de nuestro planeta, desaparece el sentido que sugieren. Una mosca pisa el último verso de la Oda Marítima de Pessoa. Pienso en la soledad de todos los poemas. Pienso en el pan y en la ciencia. Pienso en los huevos fritos y la poesía de Ronsard. Pienso en la calle, el vecindario, el viento salvaje, las enaguas, las escuelas, los colores, los días y la lluvia, los amigos y la tristeza, los patios y jardines. Mi casa, y la desesperanza de la esperanza. Las cenagosas anotaciones de tantos poetas.            

11:23 Guardo en una carpeta amarilla, disco D, un poema que finalizan con estos versos que –de seguro serán recordados dentro de cincuenta mil millones de años, pero quiero que los leas en este instante:          

“Y sufro tu nombre    
en toda            
mi carne.”       

11:38
Suenan los trenes, me descubro-pese a todo-sereno y vacío, sereno y luminoso.

11:39
“Os hablo en silencio como una nube, como un árbol.”       
Czesław Miłosz           

11:40
Y estos que están inmejorables –aunque de seguro la traducción le baja la intensidad del hechizo:


“He deseado la buena poesía sin saberlo,
he descubierto, ya tarde, su saludable objetivo.
En ella y sólo en ella, encuentro salvación.”
Czesław Miłosz/Varsovia 1945          



11.47
Si salgo de mi casa, bajo las escaleras negritas de caracol –que a cada paso tiemblan y sacuden el polvo y las piedritas acumuladas-. Y voy a buscar a Moisés-puente Charapita, Casa Alquímica- de seguro, acodados en la ventana del último piso, mantendríamos un tema de conversación mirando a los autos de la Evitamiento. Pensaría en las palabras que aquí compongo -trazos psíquicos: óleos: un poco de aceite para seguir empujado la máquina pensante, un viento restallante sobre el vacío del espíritu. Cierto: la poesía es otro asunto. Viejas edificaciones humanas. 10 mil siglos de soledad. Y después al volver, cruzando casas de tres o cuatro pisos, con perros flacos y tierra, polvo sobre polvo, polvo del desierto: sucio, lleno de vasitos de plástico, de palitos de helado; entre basuras, y bolsas, y niños con polos de equipos de fulbito que no leerán jamás estos exagerados apuntes, como yo los leo, y como leen los que otros seres humanos radiografían, entonces tendría otro buen tema de conversación y dos amigos y algún enfoque mental sobre lo que planteo —más el trazo natural de la búsqueda de la belleza, más la complejidad del vacío de la mente— mientras observo cómo se mira otro ser dentro del espacio de la realidad virtual.

11:51
Todo cambió a mi alrededor —amigos, amigas, historias, destinos, oficios, sueños, itinerarios— y yo acá en la misma sintonía escribiendo. Ahora todos hablan de sus mentes, es el nuevo virus. Si dejo de pensar en que me oigo no hay absolutamente nada más. Sin embargo, el silencio no es ausencia de yo. Se desarticula el sentido de lo estructurado. Poner la contraseña para iniciar sesión, es entender la realidad de un mundo donde las estructuras son tibiamente creadas para fines específicos. EL sol es la única semilla.

4:45
Escucho a las señoras que venden seco de pollo y chicharrón. Acaban de poner la música mientras el dj se ausentó para comprarse un puchito y charlan sobre las fiestas de fin de año. Son gorditas y felices, y conversan mientras ofrecen sus potajes en la feria artesanal de la Av. Mariátegui. Imagino la escena: cerveza en cajas rojas, canciones de salsa dura y sonrisas infinitas.             

La señora deja el vaso del ají: anaranjado, furioso. Contemplo mi seco de cabrito cual si se tratarse de una obra de arte: arroz graneado humeante, frijoles como un mar cremoso, la pierna de pollo deliciosa. Termino de chupar los cartílagos del hueso de pollo, y pienso mi destino de escritor: escribir hasta la madrugada, café caliente, meterme dos o tres latas de cervezas y seguir practicando el ritmo y respiración del soneto: ABBA, ABBA, CBC, CBC: mismo coito. Estupideces. Pero también me veo en la fiesta: feliz y ebrio, bailando, y gozando el instante: un dios de barro, perdido en la claridad de los cuerpos: en el instante de la conciencia disuelta en la simultaneidad de todos los apretujados cuerpos. Perdido en el humo azul del tabaco.

5:50
Insisto en la idea: gozando con una muchacha canciones cursis y bulliciosas, sintiendo sus dientes, desapareciendo un instante en el aire caliente, pesado y violento de otro cuerpo, sudoroso y visceral, y tocando su oreja con frases serenas y violentas. No voy a negarlo: jodido pero no vencido. Depre y dulzón, como cuando me tiraba la pera en la escuela. La misma nota. Más viejo, abandonado, a este destino.

Perdido y sin otra resolución —eterna disociación de ideas, e ir y venir entre ambulantes y niñas con la cara sucia— salgo a divagar por los parques y los perritos y los niños me miran y yo me corro de sus ojos hasta que me vuelvo a encontrar con la violencia del viento, el verde de las hojas, las nubes, los anticuchos —corazón de vaca cortada en cuadraditos para el consumo humano— y todo se arremolina en mí, y soy todo ese campus: dispersión e intensidad. Un bus cruza la avenida.

Una muchacha hermosa camina con sus hermanas. Los borrachitos brindan de su belleza. Celebran su figura. Yo sigo andado. ¿Qué me diferencia de todos los destinos? ¿Qué me separa de ser la muchacha provinciana que lleva un plato caliente de chaufa de chancho? ¿Qué me separa de ser ese niño que lustra los zapatos? ¿Qué me diferencia de ser el joven cobrador que cuenta sus monedas en medio del semáforo? ¿Qué me separa de la joven embarazada que como yo ahora espera su vuelto? ¿Qué me aleja de los jóvenes que juegan ahora videogamers en el ciber de la vuelta? ¿Qué me diferencia de la viejita que vende calzoncillos amarillos? Y en mí se traducen sus voces, la intensidad y verdad y belleza y desgarrado de las voces alborotadas.

6:00 Tómale una foto a ese árbol con tu celu:             

7:30
Voy a Ia casa de Gab. Le leo un fragmento del pasaje 5:50            

10:00
Escribir un poema titulado Salchipapa y pegarlo en tu muro del facebook:

10:28 Me picó una pulga. La saqué con cuidado y la aplasté en la mesa de madera. Pensé en millones de millones de poetas jóvenes intentando el Poema.
(…)

© Julio Barco
Audio production: Haus für Poesie, 2021

VOM SELBSTBEWUSSTSEIN EINES JUNGEN, ZUM GENUSS NEIGENDEN LATEINAMERIKANERS

alemão

Schönheit dient dazu, lustvoll zu arbeiten;  

Arbeit bedeutet Auferstehung. 

C. Norwid

Er hat gerade mit mir über mich gesprochen 

Vallejo

 

10:35 Der Morgen gibt sich modernistisch, die Wolkenkulisse neobarock & ich habe bereits 10 rastlose Gedichte verfasst. Ich werde bis gegen 14 Uhr weiterschreiben – bis es Zeit für mich wird, nach Lima zu fahren, um ein Foto für ein schönes Buch zu machen, das deine Familie, Nachbarn und Freunde erfreuen wird. 

 

10:35 Heute platze ich noch. 

 

10:39 (...) 

 

11:11 Ich denke, ich hätte nicht alles schreiben oder löschen sollen, was ich für dich empfinde. Ich denke an die Rose, die ich gestern unverschämterweise habe mitgehen lassen und mit der ich auf der Jirón de la Unión umhergestreunt bin. Ich überlege mir, wie ein vollkommenes Gedicht wohl beschaffen sein müsste? Wie meine Verzweiflung am Beginn dieses Sommers oder wie deine Anmut, die der eines Fohlens vor einem Beet junger Narzissen gleicht? Ich denke an all die Archive schöner Gedichte, die es im Universum gibt. Jenseits der Umlaufbahn unseres Planeten entfleucht der Sinn, den sie uns einflüstern. Eine Fliege setzt sich auf die letzte Strophe von Pessoas Oda Marítima. Mir kommt die Einsamkeit aller Gedichte in den Sinn. Ich denke ans Brot, an die Wissenschaft. Ich denke an Spiegeleier und an die Verse Ronsards. Ich denke an die Straße, die Nachbarn, den nicht zu zähmenden Wind, an Unterröcke, an Schulen, Farben, Tage und an den Regen, an die Freunde, die Tristesse, an Innenhöfe und Gärten. An mein Zuhause und an die Ausweglosigkeit der Hoffnung. An die schwammigen Aufschriebe so vieler Dichter. 

 

11:23 Ich bewahre in einer gelben Mappe – Diskette D – ein Gedicht auf, das mit diesen Versen endet, an die man sich – dessen bin ich mir sicher – noch in Abermilliarden von Jahren erinnern wird, aber ich will, dass du sie jetzt schon liest: 

 

„Und ich erleide deinen Namen 

im ganzen  

Körper.“ 

 

11:38 Die Züge rattern, dennoch fühle ich mich heiter und leer, bin heiter und strahle. 

 

11:39 „Ich spreche aus dem Verborgenen zu euch, wie eine Wolke, ein Baum.“  

Czesław Miłosz 

 

11:40 Und diese Verse noch, die unübertroffen sind, obwohl die Übersetzung ganz bestimmt die Vollkommenheit ihres Zaubers mindert: 

 

„Ich habe mir immer gute Poesie gewünscht, ohne es zu ahnen. 

Ich habe, erst spät im Leben, ihren heilsamen Sinn entdeckt. 

Sie, nur sie, rettet mich.“  

Czesław Miłosz/Warschau 1945 

 

11:47 Ich verlasse das Haus, gehe die schwarze Wendeltreppe hinunter, die unter jedem Schritt leicht erzittert und ihren Staub und die Kieselsteinchen abschüttelt. Meistens bin ich dann auf dem Weg zu Moisés – über die Charapita-Brücke bis zu unserem Alchemistischen Haus – wo wir uns im obersten Stockwerk ans Fenster lehnen und immer ein Gesprächsthema finden würden, wenn wir die Autos auf der Evitamiento betrachteten. Ich würde an all die Worte denken, die ich hier notiere – allesamt Seelenskizzen: Ölgemälde, ein wenig Schmieröl, damit die Denkmaschine weiterrattern kann, ein flirrender Wind über der Verlassenheit des Geistes, nichts weiter. Es stimmt: Poesie ist etwas anderes. Alte menschliche Gedankenkomplexe. Jahrtausende voller Einsamkeit. Und dann auf dem Rückweg, an drei- oder vierstöckigen Häusern entlang, an ausgemergelten Hunden und all dem Unrat vorbei, dem Staub und Dreck und Wüstensand: nur Schmutz durch all die Plastikbecher und Eisstilhölzchen; an Müllbergen, Plastiktüten und Kindern vorbei, die Fußballtrikots tragen und diese aufgebauschten Notizen nie so lesen werden, wie ich sie lese oder wie sie diejenigen lesen, die andere Menschen auch röntgen; dann hätte ich wieder ein gutes Gesprächsthema und es wären da erneut zwei Freunde zugegen, die den geistigen Fokus auf das richteten, was ich hier zum Besten gebe, – und vielleicht gäbe es dann eine natürlichere Spur in mein Streben nach Schönheit und in diese Vielschichtigkeit öder Gedanken – während ich vielleicht jemand dabei beobachten würde, wie dieser sich in einem virtuellen Raum selbst betrachtete. 

 

11:51 Alles um mich herum hat sich verändert – die Freunde, Freundinnen, Geschichten, Schicksale, Berufe, Träume, Lebenswege – und ich sitze hier und schreibe in altgedientem Modus weiter. Im Augenblick spricht jeder nur über den Verstand, das ist der neue Zeitvirus. Wenn ich aufhöre, über das, was ich in mir wahrnehme, nachzudenken, wird mir absolut nichts mehr klar. Stille bedeutet aber nicht, mir selbst abhandenzukommen. Sie hebt lediglich die Sinnhaftigkeit von Strukturen auf. Ein Passwort zu benutzen, um sich einzuloggen, heißt, die Realität einer Welt zu verstehen, in der völlig unerprobte Strukturen einem bestimmten Zweck folgen. Die einzige wirkliche Saat ist die Sonne. 

 

4:45 Ich höre den Frauen zu, die Seco de Pollo und Chicharrón feilbieten. Sie haben gerade die Musik aufgedreht, während der DJ weggegangen ist, um sich einen Glimmstängel zu kaufen, und sie palavern über die Feierlichkeiten zum Jahresende. Ich stelle mir die Szenerie vor: Bier in roten Kästen, harter Salsa-Sound und Gesichter, die ohne Ende lächeln. Die Frauen sind pausbäckig und fröhlich und schnattern in einem fort, während sie ihre Eintöpfe auf dem Kunsthandwerkermarkt in der Avenida Mariátegui verticken. 

 

Die Dame stellt ihr Ají-Glas ab: orangefarben, aufsprudelnd. Ich betrachte meinen Seco de Cabrito, als wäre es ein Kunstwerk: dampfender, körniger Reis; Bohnen wie ein aufgeschäumtes Meer; der Hähnchenschlegel ist einfach nur köstlich. Bald habe ich ihn bis auf den Knochen abgenagt und ich denke über mein Schicksal als Schriftsteller nach: Schreiben bis in die frühen Morgenstunden, heißer Kaffee, meistens zwei oder drei Dosen Bier und immer wieder den Rhythmus und den Atem eines Sonetts einübend: ABBA, ABBA, CBC, CBC: stets derselbe Koitus. Albernheiten. Aber ich sehe mich auch auf einer Party: glücklich und leicht angesäuselt, wie ich tanze und den Augenblick auskoste: ein kleiner Gott aus Lehm, erfüllt von transparenten Körpern: ein bewusster Augenblick, ich selbst zu sein, und doch aufgehoben in der Gleichzeitigkeit, in der sich all die anderen Leiber aneinanderdrängen – eins im blauen Dunst der Zigaretten. 

 

5:50 Ich bestehe darauf: mich bis zur Ekstase mit einem Mädchen kitschigen Liedern hinzugeben, ihre Zähne zu spüren, mich einen Moment lang in der heißen, schweren, vibrierenden Stimmung eines anderen Körpers neu zu erfahren; ein schweißnasser Hitzkopf zu sein, ihr Ohr mit locker flockigen und doch fordernden Worten zu liebkosen. Ich leugne es nicht: völlig abgefuckt, aber nicht unterlegen. Ein Depri und Süßholzraspler, wie damals als ich die Schule schwänzte. Dasselbe Spiel. Nur älter, verlassener, dem Schicksal ausgelieferter. 

 

Absichtsloser Verlust – ein unentwegter Missklang an Ideen, ein Kommen und Gehen zwischen Ambulantes und Mädchen mit verdreckten Gesichtern –, mach ich mich auf, um durch Parkanlagen zu stromern, wo Hunde und Kinder mich anstarren und ich vor ihren Blicken davonlaufe, bis ich erneut auf diesen nicht zu zähmenden Wind treffe, aufs Grün der Blätter, auf die Wolken, die Anticuchos, die für den Verzehr in kleine Quadrate zurechtgeschnittenen Kuhherzen, bis ich irgendwann aufbegehre, und ich das alles selbst bin: Ablenkungsmanöver und Konzentration in einem. Plötzlich kreuzt ein Bus die Allee. 

 

Ein schönes Mädchen schlendert mit ihren Schwestern vorüber. Ein paar angetrunkene Männer zelebrieren ihre Erscheinung. Ich gehe weiter. Was unterscheidet mich von all diesen Schicksalen? Was unterscheidet mich davon, wie jenes Mädchen aus der Provinz zu sein, das einen dampfenden Teller mit Chaufa de Chancho vor sich herträgt? Was unterscheidet mich von jenem Burschen, der sich als Schuhputzer verdingt? Was von dem jungen Fahrkartenverkäufer, der an einer Ampel seine Münzen zählt? Was von der jungen schwangeren Frau, die, wie ich jetzt, auf ihr Rückgeld wartet? Was unterscheidet mich von den Jugendlichen, die dort im Cyberspace um die Ecke videozocken? Was von der kleinen, alten Frau, die gelbe Unterhosen verkauft? In mir übersetzen sich ihre Namen, die Lebensintensität, die Wahrheit, die Schönheit und die Zerlumptheit ihrer rauen Stimmen. 

 

6:00 Mach mit deinem Handy ein Foto von diesem Baum:


(* s. unten)

 

7:30 Ich besuche Gab. Lese ihr ein Fragment von 5:50 Uhr vor. 

 

10:00 Ich schreibe ein Gedicht mit dem Titel Salchipapa und poste es auf Facebook: 


10:28 Ein Floh hat mich gebissen. Ich habe ihn vorsichtig rausgezogen und zerdrückte ihn auf dem Holztisch. Ich dachte an Millionen und Abermillionen junger Dichter, die sich an einem Gedicht versuchen.


Übersetzt von José F. A. Oliver

S balkona u šumi

croata | Goran Čolakhodžić

U Versaillesu svijetli metal
moderne Europe
udara i pjeva miru u čast:
smanjen na sjenku, Veliki rat
priziva proljeće, makove, mise.

Pod kestenima, u sivilu malo
rasvijetljenom Francuskom, shvaćamo
koliko program sadrži junaka,
barem dva-tri marša
više nego tužaljki.

Orkestar od čelika sa sumnjivom slasti
izvodi svaki pasaž marziale. Polako
se okrećem na jug:
nad vrhovima granja munje ranog ljeta.

Kasnije, pred ponoć, po rubu kontinenta
sedam gluhih lijevaka od vatre. Iznad
rosne trave, spori mjehuri
rasvjetnih raketa. Zatim dugi snopovi
noćnih projektila, kao štektanje
ruleta.

Između brojeva, crvenih, crnih,
najmanje je ono zeleno ništa
na koje u ovom krugu
ne igra nitko.

© Goran Čolakhodžić
Audio production: Croatian P.E.N. Centre

Von einem Balkon im Wald

alemão

In Versailles singt klirrend mit glänzendem Metall

das zeitgenössische Europa

das Hohe Lied des Friedens:

zu einem Schatten geschrumpft, ruft der Große Krieg

den Frühling an, den Mohn, den Dienst an Gott.


Unter den Kastanien, leicht ins Verstummen poliert,

durch die bloße Tatsache in Frankreich zu sein, begreifen wir plötzlich

wie viele Helden Programm sind,

mindestens zwei oder drei Märsche präsenter

als jegliche Elegien.


Ein Orchester aus Stahl intoniert mit zweifelhaftem Genuss

jedes Stück ins Martialische. Langsam

wenden wir uns gen Süden: über den Wipfel der Bäume die Hitze-

gewitter des Sommers.


Später, um Mitternacht, umrunden die Rändern des Kontinents

sieben gedämpfte Feuerschlote. Über

dem taufeuchten Gras, leuchten die Blitze

der Flakabwehr. Danach das lange Erstrahlen

nächtlicher Projektile, wie das unverhoffte Klicken

beim Roulette.


Bei all den Zahlen, Rot und Schwarz,

ist Grün das einzige,

worauf niemand

in dieser Runde gesetzt hat.

Übersetzung ins Deutsche: José F. A. Oliver, Dragica Rajčić Holzner (Hausacher LeseLenz, 2020)

Lov

croata | Goran Čolakhodžić

Lovio sam zečeve
obilno i nečujno:
nišan je ubijao, nije bilo pucnja,
krznene su vreće padale bez odgode
na suhu travu sumraka. Ostajali su
kruti, otvorenih očiju, bez kapi krvi
na stegnutim ranama, zapravo smiješni,
neopasni u toj smrti koja nije
preotela život, pa je bila prozirna.
Meni nije nestajalo metaka,
a ni njima smrti: stalno su je producirali
po humcima i jarcima.
Spušta se jesen, bit će da je to.

© Goran Čolakhodžić
from: Na kraju taj vrt
Zagreb: Jesenski i Turk, 2015
Audio production: Croatian P.E.N. Centre

Jagd

alemão

Ich habe einst Hasen gejagt

zur Genüge und völlig geräuschlos:

nicht die Schüsse, das Fadenkreuz tötete sie,

sie fielen wie Säcke aus Pelz,

aufs vertrocknete Gras am Abend. Sie wurden

steif, die Augen weit auf, nicht ein Tropfen Blut

in den Wunden: in der Tat, lächerlich,

dieser harmlose Tod, der ihnen

das Leben nicht übernahm, es war offensichtlich.

Mir fehlte nicht eine der Kugeln

und ihnen kein einziger Tod: sie erzeugten ihn ständig

zwischen Gräben und Hügeln.

Der Herbst bricht an, das könnt der Grund sein.

Übersetzung ins Deutsche: José F. A. Oliver, Dragica Rajčić Holzner (Hausacher LeseLenz, 2020)

Ministarstvo obrane

croata | Goran Čolakhodžić

Tko je venuo za cijelim
nikada nije došao do sreće

Živjeti jutros: čekati priču
a samo rečenice držati za vlasi

Stvari su veće od naše mutne sreće
duže od privida vječne prisutnosti
jače od veze od svijesti do svijesti

Za razliku od lijeske
na platanu se ne može popeti:

ljuske se odvajaju i padaš
na prepukli asfalt pred ministarstvom

Parada tenkova
zapravo ničime ne mijenja prostor
a najmanje vrijeme

U cijevi je budućnost
i nekoliko prošlosti mesa –

pod čelikom čuči
povratak na početak
i kraj

Povijest se dijeli prolaskom brigada

od njihova marša
ne možemo preko

© Goran Čolakhodžić
from: Pred gradom su kosci
Zagreb: Hrvatsko društvo pisaca, 2018
Audio production: Croatian P.E.N. Centre

Verteidigungsministerium

alemão

Wer auch immer das Ganze begehrte, 

war niemals damit zufrieden


Überleben heißt heute: auf eine Geschichte zu warten

und doch nur ein paar Sätze am Schopfe zu packen


Die Dinge sind größer als unser vages Glück

konstanter als die Illusion ewiger Anwesenheiten

stärker als unsere Bewusstseinssprünge


Im Unterschied zum Haselnussbusch 

kann man nicht auf Platanen klettern:


die Rinde fällt sofort ab 

und du fällst auf den rissigen Asphalt direkt vors Ministerium


In der Tat, eine Panzerparade

ändert den Raum in keinerlei Hinsicht

noch weniger die Zeit


Im Schießrohr liegt die Zukunft

und die Geschichte aus zahllosem Fleisch – 


Unter dem Stahlgeschütz lauert 

die Abkehr zum Anfang 

und das Ende


Geschichte machen die Truppen


Weil sie marschieren

kommen wir nicht weiter

Übersetzung ins Deutsche: José F. A. Oliver, Dragica Rajčić Holzner (Hausacher LeseLenz, 2020)

Sve polako

croata | Goran Čolakhodžić

U svibnju smokva cvate u granama,
ispod kore. Prvi od nizova zelenih pupaka
dolazi, dakle, na red.
Mogu se brojati
godine unaprijed, sve dolje do korijena.
Smokvino drvo je prepuno budućih rujnova
kao kundak stare puške metaka: teška zrna
izlijeću i praskaju tamna, zabijajući pticama
perje i cvrkut i sreću u prsa.
U još neprobušenim trbusima,
svaka smokva nosi kukca po izboru.
U jednoj je zapretan pauk,
u drugoj je mala i prugasta osa koja se godinu-dvije
još neće probuditi; ponegdje grupica mrava
nalik na sjemenke maka. U slatkom snu
mrmljaju, meškolje se i rastu.
Sve se to lagano podiže gore,
k suncu i sjeni neumitnih jeseni.

© Goran Čolakhodžić
Audio production: Croatian P.E.N. Centre

Alles zu seiner Zeit

alemão

Im Mai blüht die Feige auf in den Ästen

unter der Borke. Die erste Reihe grünbauchiger Knospen

erscheint und drängelt sich vor.

Du kannst die Jahre

im Voraus zählen, bis hinab in die Wurzeln.

Das Feigenholz strotzt vor Septembern, die kommen

wie Kugelfänge alter Gewehre: schwere Geschosse

brechen hervor, die dunkelt zerplatzen, ins federleicht fröhliche Zwitschern

zurück in den Brustkorb der Vögel.

In ihrem noch nicht durchlöcherten Bauch

verbirgt jede Feige ein Insekt ihrer Wahl. 

In einer versteckt sich die Spinne 

in einer anderen die winzige Wespe, die noch schlummert 

für mindestens ein Jahr oder zwei; in einigen pocht ein Ameisenwimmeln, 

wie Mohnblütensamen. In seinem lieblichen Traum

wächst und gedeiht es, es brummelt.

All das sprießt allmählich hervor

der Sonne entgegen und dem schon vorhandenen Herbst.

Übersetzung ins Deutsche: José F. A. Oliver, Dragica Rajčić Holzner (Hausacher LeseLenz, 2020)

*** [Imam nešto neriješeno s gradom]

croata | Goran Čolakhodžić

Imam nešto neriješeno s gradom,
odnosno, mislim da danju nismo u stanju
reći si sve. Nadoknadim, hoću
ili neću, noću, kad mi se primaknu živice
i brda se počnu kotrljati pod nogama.
Bude tu podosta prilaza ulica volti arkada
bude i podosta bronce, zelene od vlažnog mraka
u rijetko košenim parkovima.
Stalno me šalje od pročelja do pročelja
nezgodno vezanim linijama tramvaja
i često sasvim neznanim jezicima
ispisuje nazive zgrada i trgova.
Valja me po pločnicima, dobacuje haustorima,
krijući ipak unutarnja dvorišta –
dokaz da on može sanjati lucidno, ako već ja
bauljam kud moram kroz hodnike i pothodnike.
I onda me ujutro tjera u smijeh
i u podsmijeh, jer znam da se hvalisavo množi
u meni cijele noći, zamazuje mi oči, trubi propagandu,
trudeći se napraviti većim crnjim dubljim
graditi se beskonačan, uzalud u privid.

© Goran Čolakhodžić
from: Na kraju taj vrt
Zagreb: Jesenski i Turk, 2015
Audio production: Croatian P.E.N. Centre

[Ich habe irgendwie etwas Unerledigtes mit der Stadt]

alemão

Ich habe irgendwie etwas Unerledigtes mit der Stadt,

das heisst, ich denke, dass wir tagsüber unfähig sind,

uns alles zu erzählen. Ich stelle mich ihr dann, wohl

oder übel, nachts, wenn mich die Hecken einkreisen,

und sich die Berge unter meine Füße wälzen. 

Dann kehren die Kreuzungen bei mir ein, die Straßenecken unter den Arkaden, 

und ziemlich viel Kupfer, der von den nassen, dunklen Parkanlagen, 

die selten gepflegt werden, vom Grünspan befallen ist.

Ich werde von einer Häuserfront zur anderen getrieben,

auf äußerst ungünstig verbundenen Straßenbahnlinien

und oft in mir unbekannten Sprachen, die 

Namen von Häusern und Plätzen geheimnisvoll benennen.

Es wirbelt mich über Gehsteige, schleust mich vor Eingangsportale,

hinter denen sich genauso befremdliche Innenhöfe auftun – 

ein Beweis dafür, dass ich noch lichte Träume habe, wenn ich

mich durch Passagen und Unterführungen winde.

Und dann, am Morgen, macht es mich fürcherlich lachen, 

wie Hohn, weil ich weiß, dass mich etwas in mir, die ganze Nacht auf den Arm genommen,

mir ein Wolltuch über die Augen gezogen hat, wie einem Schaumschläger, 

der darum bemüht ist, noch riesiger, schwärzer, abgründiger zu erscheinen,

sich selbst ins Vergebliche einer endlosen Illusion aufbauschend.

Übersetzung ins Deutsche: José F. A. Oliver, Dragica Rajčić Holzner (Hausacher LeseLenz, 2020)

Tvoje naročje, črni ocean

esloveno | Miljana Cunta

Tvoje naročje, črni ocean
spokoja pod mojo glavo,
polno neznatnosti
tega in drugih dni.

Nekdo mi ponuja suhljato dlan,
nekdo me obsipa s sladkimi imeni,
nekdo me vidi, kjer me ni.
Vsi so preblizu, predolgo, presilno.

Zvečer zaviham rokave
in roke potopim
v hlad tvojih mnogih let.
Ko se gladina umiri,
so ostanki dneva motne lise
razpihanih oblakov,
visoko in v zapuščanju.

© Mladinska knjiga
from: Svetloba od zunaj
Mladinska knjiga, 2018
Audio production: Haus für Poesie, 2021

Ozean, schwarzer Schoß

alemão

Ozean, schwarzer Schoß,
du ruhst in meinem Kopf
aus der Fülle
unzulänglicher Tage.

Jemand reicht mir die verwaiste Hand,
jemand kost mich mit tausend Liebesnamen,
jemand erkennt mich immer dort, wo ich nie bin.
Unendlich nah und doch zu fordernd.

Am Abend kremple ich die Ärmel hoch
und tauche meine Hände
ins Kältere deiner Jahre.
Sobald es still wird,
ist das, was bleibt vom Tag,
ein Wolkenschatten,
der flüchtig fortzieht.

Übersetzung von José F. A. Oliver
erschienen in: JENSEITS DER ZEIT. Acht zeitgenössische deutsche und slowenische Dichter, Beletrina 2020

Kendalê Birînê

curdo | Fatma Savci

Her berêvar,
sirûda nifşê xewna şîn,
wek karwanekî berê yê riya hevrîşimê,
tevî bîna darçîn û qerenfîlê,
di nava me re,
bi bîranînên çavbelek re dibuhure,
dengê bilurekê bi ser me dikeve...

Nixurya qewmekî ji demê re degel,
helbesteke çiyayî ne em,
ku birînên me dizelilin,
şev li me digerin,
tavsork di destên me de dibirijin,
li mizgîniya perperîkan diqesidin,
pey xeydên zeviyê giri dikevin,
agirdanka çavan ji ken diteyisînin,
û li ber şêmuka Nêrgizan ji qerem dikevin,
bi kuştina zarok û tivîlkan,
pel bi pel ji giyana jînê diweşin,
gulleya çardexwerê 
li bejna me ya narincî naşikîne
wilo ne dûr,
di sînga me de baskên xwe dişikîne...

Ma ne mirin ne lavlavk e,
rihe wê ne ji axê tê,
şewkekî desthilatdara ye
xwe ji şewqa çavên me digire
û em di ti çaxan de,
fêr nebûn xwe bidin ber siyê...

Em xwîniyên yek xeyalê ne dilo,
banga me ya Newrozîn 
li hêtên zaferanî dişikin,
ne gunehê duriyê ye,
em gulecêwîkê welatê bê berbejnin,
li kendalê birînê jî,
bi taya eşqê dilerizin..

© Fatma Savci
Audio production: Haus für Poesie / 2017

Landschaften aus Wunden

alemão

Wenn sich die Tage neigen
wie Karawanen auf der alten Seidenstraße
ihrer Wege ziehen
singt unser Traum das Lied einer ganzen Generation,
verströmt den Geruch aus Zimt und Nelken,
geheimnisvoll wie das Schwarz der Augen
und das Spiel einer Flöte.

Das Lied derer aus mutiger Zeit.
Ein Gedicht, das aus den Bergen kommt,
unsere Wunden reinigt,
und uns Nächte schenkt,
die sich aus der Dämmerung schälen.
Dann folgen wir den Schmetterlingen,
verlassen die öden Felder der Trauer
und unsere Augen erstrahlen vor Freude,
bis sie an der Schwelle zu den Narzissen
erneut ermatten
weil unsere Kinder fallen
wie tote Blätter
unterm Feuerlauf ihrer Gewehre.
Doch stark sind wir und zärtlich
und unsere Flügel noch nicht gebrochen.

Der Tod ist keine Kletterpflanze,
die aus der Erde wuchert.
Er ist der Dorn der Macht
und sticht ins Funkeln unserer Augen,
oft – bevor wir Zuflucht finden.
Wir werden uns nicht daran gewöhnen.

Wir sind aus Blutrache Vertriebene, mein Herz,
doch im farbenfrohen Neujahrsruf, Newroz,
reißen wir das Safrangelb der Mauern ein.
Wir sind Zwillingsblumen ohne Amulett
in Landschaften aus Wunden
und erzittern nur im Fieber der Liebe.

Aus dem Kurdischen nachgedichtet von José F.A. Oliver
VERSschmuggel, Kurdisch-Deutsch, Poesiefestival Berlin, 2017

Şengesiwar

curdo | Fatma Savci

Jarê gidyanê,
Şengesiwara li ser hespê niyazê 
Riyan di sahra û deryayan de pîr dike,
Nagihîje perwazeya xwe ya şikestî 
Bi destên Zimrûdî yên birînpêçekê derman bike.

Şopa xwînê riya wê bi gundekî çiyê dixe
”Xwedê yek e dergeh hezar in” dibêje 
Kebaniya li ber tifikê 
Û memika xwe ya çepê dixe devê Karikekê.

Keçik xwe di pişta birînê de venaşêre
Bi beza xwe ya rehwanî çemê geliyekî li ber xwe dibe
li asoya xwe suretê eşqiyayekî nîgar dike
û bêrîkirinê di xeyala gihiştinê de aş dike.

Ji dûr ve dibîne ku birîndarê wê
Serî li ser kevirekî
Pişta girêdayî vedike û xwe ji çûyinekê re şiyar dike
Keçik ji kerban wek çavên stêrikeke dur diricife 
Mîna gulleyekê ber bi birîndêr ve dipeke 
û bi zimanê dilobêjekê jê pirs dike:
te ez ji şûtika xwe jî dawerivandim
niha tu yê lêva birîna xwe bi çi şil bikî?

Çavê birîndêr li ruyê wê wek heyvekê diberiqe
Besimîneke ji gul û kulê li ser lêva wî ya jêr bel dibe 
û xwe radestî perên ewran dike.

Keçik bi ber himêza xwe ya vala nakeve, 
Lê heyirî dimîne 
bê çima firîn ewqasî li kuştiyê wê tê.

© Fatma Savci
Audio production: Haus für Poesie / 2017

Die schöne Reiterin

alemão

Ein Bild der Trauer,
die schöne Reiterin im Trott der Wünsche,
von der Sahara bis zu den Meeren,
die einst so starke Sehnsuchtshand
vermag nicht mehr zu heilen.

Die Blutspur führt hinauf ins Dorf.
„Ein Gott und tausend Türen“
sagt eine Amme,
an ihrer linken Brust ein Kälbchen.

Die Reiterin bezwingt die Not,
erreicht den Fluss in raschem Lauf
und schaut das Bild ihres Geliebten,
wie er im Aufbegehren fällt.

Mit wundem Kopf auf einem Stein
löst er den Freiheitsgürtel –
er möchte gehen.
Sie zittert wie ein Stern verglüht,
eilt zu ihm hin, der todesblass,
und flüstert sanft:
Mit deinem Gurt verwaist du mich,
wo werden künftig deine Lippen?

Er strahlt im Angesicht des Mondes
und lindernd spricht sie Qual und Rosen
fügt sich dem Zug der Wolken.

Sie fürchtet keine Not, sie staunt,
wie schön ihr Liebster ist,
wenn Freiheit Flügel schenkt.

Aus dem Kurdischen nachgedichtet von José F.A. Oliver
VERSschmuggel, Kurdisch-Deutsch, Poesiefestival Berlin, 2017