Sergio Raimondi
La historia se ha de escribir sobre una playa pavimentada
La historia se ha de escribir sobre una playa pavimentada
de “Poesía Civil”
Lo que habría que ver desde aquí no es la estólida
definición vertical de los galpones hechos ladrillo a ladrillo
sino por lo contrario su dispersión horizontal
luego del efecto de un muy eficaz exlosivo
accionado en condiciones verosímiles de precaución.
El número enorme de metros quadrados que correspondieron
ayer al Estado, y antes de ayer al Cangrejal
deberá convertirse en una amplia expanada de cemento
y vacío: sólo así podrá quedar despejado el paisaje
y recién entonces se podrá imprimir sobre su nada
la imagen del nuevo proyecto de los sueños: contenedores
sobre contenedores sobre contenedores sobre contenedores.
Se trata de ofrecer la ilusión de lo que es posible empezar
de nuevo, y por lo tanto de adecuar, como se hizo
un siglo atrás con este inhóspito lugar desde las exigencias
de la empresa ferrocarril, un pasado equivocado
a un porvenir cuyo esplendor ya ha sido comprabado
en otras latitudes. Es decir: el futuro existe,
si bien por ahora está a 12 a 16 horas de avión